Publicat: 23/03/2020

Hablo con el periódico Levante-EMV sobre la situación sanitaria de la pandemia del coronavirus en Gandia, de cómo estamos gestionando desde el gabinete de crisis designado la difícil situación y del comportamiento y reacción de la ciudadanía. También expongo cómo se está desarrollando la asistencia a los afectados -especialmente a los más vulnerables- o las medidas presupuestarias que tomaremos para paliar el impacto económico.

¿Usted había llegado a imaginar alguna situación parecida a esta?
Creo que en mi generación estas cosas solo las ha visto en películas. Nuestros abuelos nos contaron historias y épocas de pasar miedo, pero nunca habría imaginado, en el siglo XXI, con los avances sociales, económicos y sanitarios que tenemos, encontrarnos con este enemigo global, que supone todo un reto mundial.

¿Cómo cree que está respondiendo Gandia ante esta situación de emergencia?
En Gandia, por una parte, y respecto a las cifras de afectados, nos dicen que estamos en una situación controlada, no somos un foco de la enfermedad. Pero también sabemos, por lo que llega desde el hospital, que el número de infectados aumentará en los próximos días. Y respecto a la reacción de la gente a las medidas impuestas por el Gobierno de España, mayoritariamente se responde de forma adecuada y ejemplar. Pero siempre quedan esas minorías que, bien por negacionismo o porque se lo toman a broma, las incumplen, y eso obliga a que los esfuerzos desde el ayuntamiento y las fuerzas de seguridad sea de persecución para sancionarlas y hagan como el resto. Porque parece que no sean conscientes de que no quedarse en casa ahora no solo es irresponsable, sino que pueden estar poniendo en riesgo la vida de muchas personas.

El ayuntamiento ha puesto en marcha diferentes operativos. Uno de ellos dirigido a personas vulnerables. ¿En qué consiste?
Hay personas con patologías previas o mayores, que son el colectivo más vulnerable y el que registra la mayor mortandad del Covid-19, que continúan con su rutina de ir a comprar la barra de pan cada día y, de alguna manera, se produce un contacto social que no están evitando. O quienes no disponen de una red social o vecinal, por problemas de movilidad o de salud, no pueden acceder a necesidades básicas. Lo que hemos hecho, a través de la Cruz Roja, que tiene mucha experiencia en emergencias, y con todas las garantías que exige el momento, es que llamen al ayuntamiento para que entren en una red de vigilancia y así poder asistirles adquiriendo alimentos, medicamentos u otras necesidades básicas.

¿Algún problema en servicios esenciales? Pienso en el suministro de agua potable, el alumbrado, la seguridad.
Los proveedores de energía y agua garantizan el suministro. Otra cosa son las familias que tienen problemas para pagar los recibos. Gandia continúa tramitando sus rentas de emergencia y, si bien ahora de forma no presencial para evitar contagios, el departamento de Servicios Sociales sigue trabajando, vía telefónica, para atender a las personas más vulnerables y que accedan a las ayudas. También la policía y otros servicios mínimos, como limpieza y labores de mantenimiento, siguen funcionando. Nosotros hemos escuchado al Gobierno de España cuando ha dicho que no va a permitir ningún lanzamiento por no pagar la hipoteca ni cortes de energía, agua o servicios esenciales, incluyendo datos de internet, esenciales hoy en día para comunicarnos con la gente y familiares en estos momentos de confinamiento. Entre todos vamos a impedir que nadie quede aislado o apartado.

¿Mantiene relación con el Consell de la Generalitat o con la Administración del Estado en estos momentos?
Prácticamente diaria. Siempre que lo necesitamos. Todos los días recibimos, por parte del equipo del presidente Ximo Puig, alguna llamada para preguntar cómo estamos y si necesitamos algo. De manera que nos sentimos arropados. Se han habilitado teléfonos específicos para ayuntamientos y responsables públicos para que, en caso de dudas sobre prestación de servicios o cualquier otra necesidad, saber cómo debemos actuar. Pienso que eso sobre todo se hace para poblaciones más pequeñas en esta situación de crisis. Nosotros hemos hecho muchas llamadas, y siempre con respuesta inmediata.

¿Quién forma el equipo de crisis en el Ayuntamiento de Gandia y cómo trabaja?
El decreto de declaración del Estado de Alarma en toda España, del día 14 de marzo, especificaba que algunas actuaciones eran de obligado cumplimiento. Eso generó un Decreto de Alcaldía, al día siguiente, para concentrar todas las capacidades y competencias de gestión de esta crisis en los departamentos de Alcaldía, en Recursos Humanos y Administración, que ostenta el concejal José Manuel Prieto, para que adopte todas las decisiones dirigidas a que el ayuntamiento no colapsara y prestara los servicios mínimos que la ciudad requiere. También en el concejal de Seguridad Ciudadana y de Contratación, Nacho Arnau, para poder suspender todos los contratos que se considere que ahora no puedan aplicarse, como por ejemplo los de la Zona Azul o SaforBici, o para activar cuantas medidas sean necesarias para ayudar a la ciudadanía.

Foto: Àlex Oltra

Y, obviamente, la concejalía de Sanidad y Salud, con Liduvina Gil, para dar las órdenes necesarias o habilitar los recursos dirigidos a garantizar la seguridad sanitaria de Gandia siguiendo las indicaciones del Ministerio de Sanidad. En definitiva, es un grupo reducido que concentra las competencias para, en un Estado de Alarma, habilitar cualquier recurso sin procedimiento de contratación, incluso sin presupuesto, para agilizar y tomar las decisiones adecuadas y así cumplir lo que pide el Gobierno de España: que nadie quede apartado y que se presten los servicios mínimos indispensables.

¿En algún momento se ha planteado aprovechar los hoteles de Gandia que han cerrado para medicalizarlos y atender a los afectados, como ha ocurrido en otros territorios?
Ese planteamiento corresponde a la Conselleria de Sanidad. Lo que sí tenemos claro es que todos estamos a su disposición, por ser la competente en nuestra comunidad autónoma, o bien del Ministerio de Sanidad. En Gandia, de forma espontánea, los hoteles se han puesto en contacto con nosotros para ofrecerse a ello. Y también otros locales, como restaurantes, e incluso tiendas. Yo siempre digo que en estas situaciones es cuando se demuestra la altura de las personas y de su solidaridad, y la verdad es que Gandia ha vuelto a responder de forma ejemplar ante esta situación. Nosotros tenemos un listado de esas infraestructuras para ofrecerlas si se nos solicita.

En el ámbito económico, que todo apunta a catástrofe, ¿Gandia, por el peso del turismo, va a ser una ciudad especialmente golpeada por esta crisis?
Tenemos hoteles, restaurantes y comercios cerrados. Habrá situaciones diferentes. Seguramente algunos empresarios podrán aguantar esta situación, aunque les golpeará de forma dramática y contundente, pero otros, cuando todo esto pase, no podrán abrir la persiana. Y eso nos preocupa al mismo tiempo que nos ocupa. Estamos viendo cómo el Gobierno de España está arbitrando medidas para que las empresas puedan sobrevivir, que los autónomos puedan cobrar el paro aunque no reúnan las condiciones…

Foto: Àlex Oltra

De manera que ahora debemos garantizar que todos sobrevivan y, después, reconstruir, y esa es la palabra que usaba en el Congreso el presidente Pedro Sánchez, porque se va a destruir mucho y habrá que reconstruir mucho. Yo quiero tener una mirada de optimismo y de esperanza, pero sin ocultar que es una crisis clarísima y una catástrofe que necesitará muchos esfuerzos. De hecho, en Gandia acabamos de aprobar un presupuesto municipal que tendremos que cambiar completamente. Como Gobierno local, no tenemos otra opción que redirigir el dinero y los recursos, probablemente durante toda la legislatura, a las nuevas prioridades de la ciudad, que, sin duda, van a ser asistir a las consecuencias que esta crisis habrá causado.

Usted que ha hablado con autoridades de distintas administraciones, ¿alguien le ha dicho cuándo puede acabar todo esto?
No. Se barajan informes, uno de ellos de la Universitat Politècnica de València, y todos hablan de que falta mucho. El Estado de Alarma se declaró para quince días, con potestad de prorrogarse otro quince, pero todo apunta, mirándonos en el espejo de China o Italia, que esto se va a prolongar más tiempo. Nadie se atreve a poner fechas. Nosotros lo que tenemos que intentar es que esas curvas de contagios sean lo menos pronunciadas posible, aprender de otros países para que nuestro sistema sanitario no colapse y no deje a nadie sin asistencia. Porque una cosa es que te contagies y no sobrevivas, pero otra es que no sobrevivas porque ni siquiera te pueden atender. Eso es durísimo en pleno año 2020 en España, que puede enorgullecerse de su sanidad pública. Sería durísimo y tristísimo, y por eso no paramos de repetir, porque nos lo creemos, que la mejor manera de ayudar en esta crisis y no repetir errores pasados o de otros países es quedarse en casa y ser disciplinados.


Entrevista publicada el 22 de marzo de 2020 en Levante-EMV.

blog En Portada