Anoche (03 de julio del 2015) fui testigo de primera mano de lo que pasó en la playa de Gandia y por eso he estado hablando con la Policía Local y con los propietarios de la discoteca Falkata con la finalidad de averiguar cuál es la situación.
El anterior gobierno concedió a esta discoteca una serie de permisos para actividades de conciertos, uno de los cuales es el que tuvo lugar anoche (entre las 18:00 y la 01:00). Este tipo de permisos implica la posibilidad de que la música pueda sonar sin ningún tipo de limitación al tratarse de situaciones excepcionales. Para hoy, los propietarios de Falkata me han asegurado que la actividad no será de concierto, sino de discoteca, utilizando limitadores de sonido que garanticen que el ruido esté dentro de los parámetros que marca la normativa. No obstante, considero que ayer tampoco era necesario abusar tanto de la paciencia de la gente.
He organizado para este mismo lunes una reunión interna para saber todo lo que ha pasado y, a lo largo de la semana, me sentaré con las partes implicadas para llegar a soluciones que no perjudiquen a nadie. Queremos conciliar el trabajo de las empresas que dan trabajo y generan economía, con el descanso de todas aquellas personas que vienen a nuestra ciudad a descansar.
Sobre todo: transparencia. He querido compartir con todos vosotros todo lo que a estas horas sé de lo que ha ocurrido. Y os garantizo que vamos a trabajar para llegar a un equilibrio aceptado por todos y que no perjudique a nadie.
POSIBLE CIERRE DE LA DISCOTECA WONDERWALL
Y una aclaración para acabar: el tema del posible cierre de Wonderwall no ha sido una decisión del gobierno que presido. Ha sido la Generalitat Valenciana, con una orden firmada por el gobierno en funciones del PP, la que ha ordenado al Ayuntamiento de Gandia un cese de la actividad en Wonderwall. Este gobierno no puede desobedecer una orden de la Conselleria, porque no podemos hacerlo y porque nadie puede pedirnos que lo hagamos. Pero os informamos que será un proceso garantista que seguirá la normativa, y la empresa podrá alegar y recurrir la decisión en defensa de sus intereses. Nosotros, como no podría ser de otra manera, haremos públicos todos los papeles para demostrar y justificar cada paso que se dé.